Imperator Santiagus Caesar Posteguillus Augustus

Santiago Posteguillo es el gran escritor de novela histórica de España, el cual ha logrado a través de sus dos magistrales trilogías hacer que todos nos interesemos por la mayor civilización que ha habido: ROMA
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Nacido en 1967 en Valencia, Posteguillo ha demostrado con creces que se puede hacer llegar la historia a todos de una manera interesantísima.
Las claves de su éxito son su lenguaje cinematográfico que hace más interesante sus novelas, capítulos cortos en los que SIEMPRE pasa algo importante, su exhaustiva documentación histórica, su esfuerzo por hacer entendibles sus libros, diálogos vivos y una estructura amena.
 Sus dos sagas más famosas son sobre Escipión el Africano (Africanus) que fue un general romano de la época Republicana, el cual salvó de la destrucción a Roma y derrotó en el campo de batalla a otro de los más grandes estrategas de la historia, el hombre que puso de rodillas a los pueblos hispanos: Aníbal Barca de Cartago.

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En la primera novela: Africanus el hijo del cónsul, Posteguillo nos muestra la infancia de Publio Cornelio Escipión, hijo de un senador-con el mismo nombre- de una de las familias más antiguas y poderosas de Roma. Y sobrino de Cneo Cornelio Escipión, un senador y guerrero enorme que adiestró en el arte de matar a su sobrino desde pequeño.
El joven patricio fue educado en política, filosofía, literatura, griego, geografía, historia y arte por un esclavo de origen griego que su padre dispuso como pedagogo para su primogénito y para también su otro hijo Lucio.
Pero la infancia de ambos se ve interrumpida por la Segunda Guerra Púnica, en la cual su padre como cónsul (la magistradura de mayor rango en Roma) se lanza al norte de Italia para parar a un Aníbal que ha osado intentar cruzar los Alpes en invierno, un suicido para cualquiera, pero claro Aníbal no es un cualquiera.
Mientras en Roma su tío no para de invitar a su sobrino a vino y mujeres. Además de que la mano del mayor enemigo político interno de la familia: Quinto Fabio Máximo- El princeps senatus, o sea el senador más veterano- intenta destruir a la familia y hacerse con el control absoluto de roma.
Y conoce a la que será su mano derecha inseparable, Cayo Lelio, un disciplinado guerrero que salvará más de una vez al joven Africanus.
El libro termina con la campaña de Hispania, la primera vez que Publio tiene a sus órdenes a un ejército. Y para ser su primera campaña dirigida personalmente no lo hace nada mal.

En la segunda: Las legiones malditas, Escipión toma el mando de la V y VI, las dos legiones supervivientes al mayor desastre militar de la historia romana: Cannae - o Cannas- En la que Aníbal borró del mapa a 60 mil romanos, a pesar de estar en clara inferioridad numérica, y con ellas intenta lo imposible: tomar África y acabar con una guerra que se hacía eterna. A pesar de las quejas del Senado, Publio emprende la invasión y toda la guerra se decidirá en la famosa batalla de Zama. En la que los dos mayores estrategas militares del momento tendrán una batalla campal, en la que habrá misiones imposibles, muchísimos elefantes, espadas, lanzas, hondas, flechas, heridos, muertes, victoriosos y derrotados. La batalla que Escipión levaba toda su vida esperando...

En la tercera: La traición de Roma, Publio nos cuenta sus memorias y cómo Roma había traicionado al mayor héroe que habían tenido. Nos cuenta la vida de los tres hijos de Africanus: Una hija mayor dócil, un primogénito que no estaba nunca a la altura de su padre y una hija menor rebelde que no acepta un no por respuesta. Se narra la cúspide del poder de Publio y su caída catastrófica por culpa del sucesor de Fabio Máximo: Catón el viejo.
Además se ve la campaña contra el Imperio Seleúcida, el reino más poderoso de aquellos que sucedieron al gran Alejandro Magno. Que culmina con la batalla de Magnesia, en la que tanto Lucio como Publio planean emular al conquistador macedónico para salvarse de los temidos catafractos...


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En la segunda saga cambiamos de escenario, seguimos en Roma pero pasamos de la República al Imperio.
Y vamos a ver a Marco Ulpio Trajano, el primer emperador romano nacido fuera de Italia y el primero de los tres emperador hispanos que tuvo Roma.
Trajano fue el que llevó a su patria a la mayor extensión con la conquista de Dacia (actual Rumania) y la conquista de Persia (actual Iraq). Proclamado a su muerte Optimus Princeps, que significa el mejor líder posible. Un César que defendió la justicia, la lucha contra la corrupción y la tolerancia. Este emperador paró la persecución a los cristianos y demás religiones del Imperio a cambio de que juraran lealtad a Roma.
Además fue un genio militar, de hecho en la guerra del Golfo, Estados Unidos copió la idea a Trajano para conquistar Iraq, y les fue perfecto.

En la primera novela: Los asesinos del emperador, vemos a un Trajano adulto que guarda la frontera del Rin contra los bárbaros germanos y a una Roma sumida en la miseria con un emperador loco que mata a todo aquel que destaque lo más mínimo. Hablamos de Domiciano. Así que vemos a un Trajano que tiene que compaginar el cumplir con su deber y a la vez no destacar en él para evitar que la mirada del César se pose sobre él.
Ante tanta injusticia se planea el asesinato del emperador, y cuando todo parece perdido tenemos un flash-back hasta la infancia de Trajano. Y entendemos el porqué de la decadencia romana tras la muerte de Nerón- uno de los mayores tiranos de Roma- hasta la subida al trono de Domiciano, pasando por el saqueo del gran templo de Jerusalén que financiará el Anfiteatro Flavio, que hoy en día conocemos como El Coliseo.
Vamos comprendiendo el nivel de paranoia del César, y cómo tras su asesinato se nombra a Nerva un viejo senador incapaz de controlar el país nombra como sucesor al héroe del ejército: Trajano. Y tras la muerte del primero, Trajano se erige como Imperator Caesar Augustus y líder supremo de Roma.
Todo esto con el plus de combates de gladiadores que entretendrán tanto a la plebe como a los patricios.

En la segunda novela: Circo Máximo, vemos espectaculares carreras de cuadrigas, las campañas contra la Dacia, el gobierno impecable de Trajano, a su sobrino Adriano que ansía por encima de todo el poder de su tío. Un juicio contra una vestal, la mujer más sagrada de toda Roma. El encarcelamiento de la mano derecha de Trajano: Longino. El ascenso dentro del círculo de confianza del César de Lucio Quieto. La genialidad estratégica del Augusto...
Como dijo el autor tiene una estructura de espejo, y para quien lo haya leído sabrá que Posteguillo lo clavó con esa afirmación.

En la tercera y más ambiciosa novela tenemos: La Legión perdida, la historia del sueño de Trajano: conquistar Persia. Algo que se intentó en la época de Julio César y fue un fracaso absoluto a manos del inútil Craso (de ahí viene la expresión craso error). Veremos romances, viajes imposibles, lenguas de todo el mundo y si en las demás obras teníamos relatos en latín, dacio y griego aquí se suma el sánscrito, el persa, el chino clásico y el sármata. Historias de las naciones de donde proceden esas lenguas. La lucha entre la pesadilla de Craso y el sueño de Trajano. El cada vez más ambicioso Adriano, el cada vez en más gracia del César Lucio... Sólo diré una cosa más:
El libro se publicó el 23 de febrero y no fue por casualidad.



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Para finalizar el relato de las obras de Posteguillo nombraremos sus dos breves ensayos sobre la literatura universal:
La sangre de los libros y La noche en la que Frankestein leyó el Quijote.

Santiago actualmente trabaja de profesor de literatura inglesa en la universidad de Jaume I de Castellón, profesión que compagina más que perfectamente con sus novelas y ensayos.

El mayor vendedor de novela histórica de nuestra patria ha dejado caer que está planeando una nueva novela histórica sobre España con un personaje histórico que ha pasado al olvido...

Un saludo y...
SPQR
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